sin princesas ni caballeros.
Solos a la orilla de un río,
vestidos de musgo y silencio.
Ciegas sueñan las armaduras
el más inútil de los sueños.
Reposan de largas batallas,
se miran en libros de cuentos.
Los dragones y las alimañas
Los dragones y las alimañas
no los defendieron del tempo.
Los castillos están solos,
muy tristes de sombras e misterios.